Efecto placebo, ¿En qué consiste y qué poder tiene?
Sara Tabares, parte del equipo de entrenadores personales en Valencia PERFORMA, nos explica el efecto placebo en compañía de JM […]
Sara Tabares, parte del equipo de entrenadores personales en Valencia PERFORMA, nos explica el efecto placebo en compañía de JM Mulet, investigador del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC). En 1890, un editorial de la revista Medical Press contaba el caso de un medico que, en lugar de administrar morfina a su paciente, administró agua. Su paciente se recuperó perfectamente, pero descubrió el engaño tiempo después y exigió que le reembolsaran la factura delante de un tribunal, un juicio que acabó ganando.
¿Se le da al placebo el peso que se merece? Cuando se evalúa un nuevo medicamento se hace con doble ciego: se da el medicamento real a un grupo y el placebo a un grupo de estudio. Tanto el médico como el paciente desconoces cuál es cual. En latín la palabra placebo significa ‘parecer bien’ o ‘complacer’. Los medicamentos crean expectativas de curación en los pacientes, pero el efecto placebo abarca mucho más que unas simples pastillas, también influye su forma, su color… Por ejemplo, las pastillas tranquilizantes se presentan normalmente con colores blancos y azules, mientras que las estimulantes cuentan con colores potentes como el rojo o el naranja.
También es interesante tener en cuenta que el efecto placebo funciona mejor en niños que en adultos, así lo determinó el estudio Greater Response to Placebo in Children Than in Adults: A Systematic Review and Meta-Analysis in Drug-Resistant Partial Epilepsy, un metaanálisis publicado en Plos Medicine que descubrió que el 19% de los niños y tan sólo el 10% de los adultos mejoraban con el placebo. Continuando con la temática infantil, otra investigación sobre la depresión pediátrica Placebo Response in Randomized Controlled Trials of Antidepressants for Pediatric Major Depressive Disorder, encontró que el efecto placebo era mucho mayor en niños menores de 12 años.
Se tiene la creencia de que las llamadas “medicinas alternativas” están basadas en el efecto placebo. Por ejemplo, la homeopatía es un placebo, ya que el Ministerio de Sanidad ha confrimado que nunca este tipo de productos ha superado un ensayo de doble ciego.
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