Probablemente el título del post te haya impactado o de primeras pienses que se trata de una broma. Cada vez que oigo a un entrenador decir que para adelgazar o para llevar un estilo de vida sano hay que restringir de manera drástica, incluso eliminar, el consumo de las grasas de la dieta, no puedo evitar echarme las manos a la cabeza.

¿Serías capaz de dejar que un entrenador diseñase tu casa o te opere de una hernia? No, ¿verdad? Sin embargo, sí dejas que te diga cuál es la mejor manera de comer. ¿Por qué no acudir a un médico especialista como haríamos si tuviéramos un problema serio? La realidad es que una dieta potencialmente dañina es un problema muy serio.

Para respaldar la afirmación que encabeza este artículo, que puede antojarse fuera de toda lógica, voy a empezar hablando de las vitaminas.

Todas las vitaminas pertenecientes a los grupos A, D, E y K, las liposolubles, se encuentran disueltas en las grasas, algunas de ellas únicamente en las grasas. Si eliminas o reduces de manera drástica la ingesta de grasa no ingerirás un gran número de estas vitaminas fundamentales para la vida. Es más, si lo haces durante un largo período de tiempo, acabarás enfermo.

Hace unos años se puso de moda comprar todos los productos en su versión bajo o libre de grasa. Desde entonces todos los estudios coinciden en que estos alimentos influyen de manera negativa en la ingesta de vitaminas. Incluso un estudio defendió que, en cuanto a nutrientes esenciales, en muchos países subdesarrollados se alimentan mejor que nosotros.

Según un estudio realizado por la Food and Drug Administration de Estados Unidos (FDA) en el 2010, la media de consumo de vitamina A, fundamental para la salud de la piel, pelo, ojos y el sistema inmunológico, se encuentra en la mitad de la cantidad recomendada. Por su parte, la vitamina E, determinante para el correcto funcionamiento del sistema inmunológico, no alcanza los dos tercios. Si bien es cierto que algunos vegetales como espinacas, zanahoria o col poseen Betacaroteno, perteneciente al grupo A, requieren de grasa para maximizar su absorción.

Así que ya sabes, la próxima vez que alguien te diga que es mejor evitar las grasas en tu dieta, ten en cuenta esta información y recuerda que la ausencia de la misma puede traer problemas en tu salud.